Mucha gente todavía se pregunta si la Big Data para directivos es realmente útil o se trata de una moda pasajera. La realidad es que esta herramienta responde a muchos interrogantes que hasta hace poco ni siquiera se habían definido. Además, contribuye a minimizar los gastos económicos y de tiempo, a generar nuevos productos, a tomar decisiones oportunas e inteligentes y a ofrecer soluciones óptimas.

Con el empleo de esta avanzada tecnología es posible establecer puntos de referencia que permitan a los analistas identificar las situaciones de una manera más detallada y fácil de entender. El Big Data genera valor en las empresas al gestionar con transparencia la información, y gracias a que se conocen una mayor cantidad de detalles, las decisiones son más acertadas, el desempeño mejora, se pueden realizar pruebas controladas, la segmentación del mercado es más eficiente, etc.

Algunas áreas donde el Big Data marca la diferencia

 

Los aspectos más sencillos y cotidianos de la vida actual se ven influenciados por el uso de esta poderosa herramienta. Así, el servicio de Google Maps, las recomendaciones de Amazon basadas en los gustos de los usuarios, los trending topics de Twitter, etc., son prueba de ello. No obstante, hay aplicaciones empresariales sobre las cuales se concentran los esfuerzos:

 

• Marketing y ventas: los datos procesados se utilizan para entender las necesidades y conductas de la clientela, segmentándola de modo más inteligente. La meta perseguida es, casi siempre, el desarrollo de modelos predictivos, de tal forma que las cadenas de supermercados sepan qué artículos se comercializan mejor, las empresas aseguradoras entiendan cómo conducen los asegurados e incluso que se optimicen las campañas electorales según las preferencias de los votantes.

 

• Procesos de negocio: el inventario, por ejemplo, se optimiza a partir de predicciones realizadas con la información suministrada por las redes sociales, tendencias vistas en los motores de búsqueda, pronósticos meteorológicos, etc. Una aplicación beneficiada es la cadena de suministro; así, con los sensores de GPS se puede hacer seguimiento a vehículos de reparto de mercancía y optimizar las rutas según el tráfico. En el área de recursos humanos, se usa para detectar y adquirir talentos profesionales.

 

• Salud pública: los datos masivos permiten aumentar el conocimiento del material genético, lo que ayuda a aprender más sobre los ancestros y la herencia, definir la mejor dieta de acuerdo al genotipo o por qué se descontrolan ciertos genes que generan trastornos crónicos. Asimismo, es posible entender las causas y mecanismos de propagación, así como desarrollar nuevos tratamientos para enfermedades consideradas incurables hasta ahora.

 

• Mejora de las áreas poblacionales: basados en el Big Data se desarrollan proyectos de ciudades inteligentes, donde se optimiza el tráfico para reducir el tiempo de desplazamiento de los habitantes y la contaminación ambiental. De este modo, si un vuelo se retrasa, la salida de los autobuses se ajusta automáticamente al nuevo horario o los semáforos actúan de manera coordinada, evitando al máximo los embotellamientos.